domingo, 21 de septiembre de 2014

Los sueños sueños son, pero...

Hola amigos, hoy voy a compartir con vosotros algo que escribí hace algún tiempo, creo que hará año y medio o así. La persona de la que hablo salió de mi vida meses antes tras muchos intentos fallidos por mi parte de que eso ocurriera, fue alguien que realmente me cambió, nuestra relación me enseño más sobre mi que ninguna otra y también me hizo sufrir mas que las demás.
He corregido pequeños matices y aunque ahora creo que lo habría escrito de forma diferente he preferido conservar el texto tal cual.
La razón por la que me he molestado en buscarlo y volver a leerlo es porque de nuevo la casualidad, una simple imagen, lo ha devuelto a mi mente. 
Ahí os lo dejo, espero que os guste.  

Vaya semanita de sueños extraños... Aunque el de hoy se lleva la palma. 

No se si os pasará que cualquier sensación o sentimiento vivido en sueños lo sentís igual de real que despiertos. A mi me ha llegado a ocurrir que llorando en sueños me desperté del mismo mal rato o que estuviera descojonada y fuesen mis propias carcajadas las que me trajesen de nuevo a la realidad.

Los sueños sueños son, pero...
No por casualidad una persona del pasado que ronda mi mente estos días aparece en mi sueño, sueño que sin lugar a duda tiene su aspecto positivo o al menos yo quiero verlo así. 
Nos encontramos, sabiendo yo que él ha rehecho felizmente su vida, cosa que se que debe alegrarme pero por alguna razón aún me duele y entristece un poco. (Siendo totalmente franca pienso que la razón es que en mi caso eso no haya ocurrido, por muy bien que me encuentre). 
Sigo, acabamos paseando juntos, yendo a su casa, hablando de todo incluyendo su nueva relación, viendo fotos de ella... Todo de muy buen rollo.

Ufffffff!

La historia no es lo que ha ocurrido en el sueño, en el que por cierto acababa demostrándome que aún tenía algún sentimiento por mi, sino volver a padecer la sensación de que me tiembla todo el cuerpo solo de tenerle delante, sentir que me cuesta caminar de como mis piernas se tambalean en su presencia, como intento sonreír sin éxito ante palabras que me desgarran por dentro, ver que no puedo hablar con coherencia, que sigue dominando todo mi universo cuando ni ahora ni nunca debió ser así.

- Realmente se superan las historias de amor que tanto nos marcan o simplemente van perdiendo intensidad con el tiempo? 
- Volvería a sentirme así si ocurriera el momento al que me ha trasladado hoy mi sueño?

Sea lo que sea, mi corazón me dice que siga mirando al frente como hasta ahora y que debo alegrarme de que personas que algún día formaron una parte tan importante de mi vida, sean felices.

Buenos días a todos y feliz lunes!

miércoles, 10 de septiembre de 2014

Falsa alarma!

Os acordáis de aquella historia que os conté sobre un chico.... (Post anterior), pues falsa alarma!
Catalogué de interesante a alguien a quien ese adjetivo le quedaba muy grande.

Cuanto más conoces a personas interesantes de verdad, cosa que es tremendamente complicada si le añadimos un cierto atractivo vuelvo a insistir en ello, más cuenta te das de lo que es tener delante a una mente brillante o un sujeto insípido más, pero al final en mi caso siempre hay algo que se interpone.

Creo en eso de que las cosas pasan siempre por alguna razón con lo cual no me queda otra que aceptar mi error con una sonrisa y seguir mirando al frente, ansiosa por saber que nueva aventura me tiene la vida preparada. 
Con una puerta ya cerrada y un manojo de llaves en mi bolsillo.

También creo que en las historias de amor de verdad, a estas alturas, o de primeras sale todo rodado o no hay nada que hacer, con el tiempo llegarán los buenos o malos momentos, estos últimos serán sufragados con cariño, pero nada de tener que esperar en completa incertidumbre ni luchar por quien no muestra ni un mínimo de interés. 
Por mucho que les guste a los hombres conquistar y a nosotras ser conquistadas creo que en mayor o menor medida debe haber un equilibrio por ambas partes a la hora de enamorar, sin prisa ni pausa, sin relajarse ni precipitar nada, dejarse llevar al ritmo que nos marque el corazón sin más.

Las vacaciones me han sentado bien y vuelvo con ilusiones renovadas, esperanzada en que el camino a la felicidad es el único posible así que espero aparecer más frecuentemente por aquí con la positividad que creo que me caracteriza y con nuevas anécdotas del día a día de las que no dejan indiferente.
Gracias por leerme un beso grande a todos.