miércoles, 28 de enero de 2015

Cumplir tus expectativas!


Hola a todos, me alegra volver a saludaros con una nueva reflexión.
Cuando conocemos a alguien demasiadas veces nos sometemos a una serie de preguntas trampa, aquí algunos buenos ejemplos de ellas. 

- ¿Qué edad tienes? 
Dando por hecho que eso nos hablará del grado de madurez o picardía.  
- ¿Dónde trabajas? 
Está lleva implícita si trabaja o no y puede ser sustituida por dónde estudias y con ella se elucubra sobre sueldo y formación.
- ¿Vives con tus padres?
El interés es por saber el nivel de independencia que tiene para poder hacer o no, lo que quiera cuando quiera.
- ¿Por dónde sueles salir?
Nos da varios datos, si es muy de salir por las noche y en que ambiente le podemos encasillar.
- ¿Qué música te gusta? 
Contestar a esta pregunta de forma correcta mostrando cultura musical puede hacer ganar muchos puntos aunque no coincidáis en gustos, al igual que un fan de Camela puede perderlos todos instantáneamente, por poner un ejemplo. Prevalezcan mis disculpas a los seguidores de ese grupo de antemano. 
Y la que mas me gusta por no decir la que mas me molesta es la siguiente.
- ¿Cómo es que alguien como tú no tiene pareja?
En primer lugar nos confirma su estado civil y de rebote en el tono, si se encuentra a gusto con él o por el contrario espera o desea cambiarlo. Creo que pocos somos totalmente sinceros ante desconocidos en ese aspecto, siempre procuramos mostrarnos felices con lo que tenemos, enamorados o independientes disfrutones. 
Que les importará a ellos! 

Y tras ese leve test, listo! ya te han hecho un perfil que ni los de la serie esta de mentes crimínales. Da igual lo que digas o hagas, a partir de ahora todo tendrá su explicación y base en lo que creen saber de ti. 
La cosa está en que las apariencias siempre nos han engañado pero es más fácil dejarse llevar por ellas, siempre y cuando no se esté hablando de ti claro, en tal caso decimos que la gente es injusta y no tienen personalidad creyendo o juzgando con lo primero que escuchan. Así somos.
Por eso yo odio hablar de mi pasado en el terreno personal sobretodo, cuando conozco a alguien. En primer lugar porque eso habla de quien fui, de quien me ha llevado hasta aquí, pero no de quien soy hoy y de como actuaré mañana que por supuesto será diferente. Permitidme la sobrada de decir que aprendo de mis errores y procuro que los venideros sean al menos nuevos. 
Bien es cierto que el hombre es el único animal que tropieza tres veces con la misma piedra y es que hay ciertos rasgos de nuestro carácter, de quien somos, que no podemos o simplemente no queremos cambiar. 

A mi me pasa en este tema de juzgar a las personas del que hoy os hablo. 
Sabes cuando todo indica a que es un capullo o una estúpida y aún así sigues conversando con esa persona hasta que te lo desvela mediante alguna jugarreta infantil, avergonzante, patética o incluso dolorosa? Pues yo suelo llegar hasta ahí. 

Me siento bien dando la oportunidad de demostrar que las cosas no siempre son lo que parecen, quizá porque siempre he pensado que mi imagen no se corresponde con lo que soy o porque me falló el niño bueno de la clase y fui defendida por la que habían expulsado o también porque a veces en el camino me sorprendo gratamente conociendo a personas interesantes que rompen todos los clichés. 
No me gustan los estereotipos de hombre o mujer perfecta, ni la gente que sigue unas estrictas pautas de catalogación de sujetos simplificando la convivencia con falsas sonrisas y oídos sordos a la realidad de lo que hacemos y somos.
Esto tristemente pasa en ambos sentidos, no se cual es peor realmente, si el menosprecio por no cumplir tus expectativas de idoneidad o la idealización por aprobar todas las cuestiones de tu mierda de test sociológico.

Así que yo te permito que me engañes, me dejo llevar por lo que veo y no por lo que oigo, creo en la existencia de ultras de corazón noble y religiosos de malos deseos, en ricos humildes y en pobres soberbios, creo que quien fuiste te convierte en quien eres y no en el reflejo de tus errores. La vida cada día nos da la posibilidad de cambiar y aprender, solo depende de nosotros.

Y por ultimo quiero decir que no concibo la gente que prejuzga cerrándose caminos, pero he aprendido a sobrellevar con absoluto pasotismo el error sobre mi, las cosas siempre acaban cayendo por su propio peso y confieso que disfruto con la sentencia final. 
Sé quien quieras ser pero no me intentes hacer creer que como tu ves a la gente es como está bien porque incluso los mas fieles a si mismos actuamos de diferente manera según las circunstancias. Y ni un hecho aislado ni mil palabras podrán descifrar jamás quienes somos. 
Así que ábrete a lo desconocido e intentar solo... 
- Cumplir tus expectativas!

Besos a todos y gracias por leerme.