viernes, 25 de octubre de 2013

Los maravillosos inicios de las relaciones... Si! Ya!

Hoy voy a escribir sobre mi peculiar perspectiva de los comienzos de las relaciones, esos idílicos momentos que vivimos cuando conocemos a alguien y milagrosamente nos gusta hasta el punto de tener interés por saber más, conocer.
Estos, señores y señoritas, son los conceptos adecuados, 'conocer', que nos despierten 'interés', por favor nada 'amores' a primera vista ni 'te quieros' en un mes baggg, seamos adultos!!!

Y bien, ocurre el milagro, lo ves sonríes, te ve y sonríe, plin!!! Se agitó la barita o lo que quiera que tuviera Cupido entre las manos y ahí estamos, preparados para la maratón o... quizás quede en un simple calentamiento, no se.

Comenzamos. Dependiendo del modo en que se crucen nuestras vidas podrá variar el nivel de tonteo previo a la cita, si es en persona (trabajo, amigos,  barrio, gym...) puedes jugar con más armas y siempre es más factible un encuentro a solas después de esos cara a cara, ya manejamos información al igual que nuestro contrincante, y si aún así entramos en combate es por algo. Vayamos con actitud positiva, solo a echar un buen rato, nos decimos a nosotros mismos.
Si por el contrario es a través de una pantalla, OJO! Corremos un tremendo peligro a crearnos una idea incorrecta de lo hay detrás de ese cristal, metal, hondas y deditos que nos hacen llegar las ÚNICAS referencias que tenemos. Centremos en lo positivo, es más relajado y fácil ser uno mismo, no cagarla con los nervios, tirado/a en el sofá de nuestra casa en pijama que tener que cumplir con las apariencias delante de quien nos gusta, pero es un arma de doble filo sin duda. A lo que leemos, como sucede con cualquier libro, la imaginación de cada cual le pone su parte. 
Nota importante : Cuanto más grande la tengas, la imaginación, peor! Ciñete a lo que lees, no versiones ni saquemos conclusiones enrevesadas para llegar a ver lo que queremos o lo que nuestro castigado corazón desconfiante nos obligue deducir.

Sigamos. Llegado el día de verse, que creo que no es bueno prolongar mucho para no encontramos con sorpresas después de haber idealizado a esa persona, con tantas y tantas vueltas a nuestros encuentros o conversaciones, llegan las oleadas de dudas. 
Le gustara el pelo rizado o liso, recogido o suelto, falda o pantalón, muy normal o demasiado maquillada ,este escote será muy provocativo??!!!
Y tras horas y horas acabas, llevas tu mejor sonrisa y bien aprendida la lección, si está aquí es porque quiere igual que yo, así que voy a mostrarme tal cual, segura de mi misma. 
- Y por qué no? - Yyyyyá!!!

Sales de casa mirándote en todo lo que desprenda un mínimo reflejo, te sudan las manos, con suerte solo las manos, si es verano eres consciente de que como la cosa vaya mal y empiece a ponerse tensa, puedes acabar recordando a Camacho seleccionador. Y seguridad? Si si! A ver si consigo que mis piernas y manos dejen de temblar, decir tres frases sin reírme y sin trabarme la lengua y después hablamos de MI-SE-GU-RI-DAD. 

A veces va mal y otras bien, claro. 
Cuando va mal: yo soy de la opinión que si has visto algo especial en alguien, a menos que te demuestre que posee el talento de ser un completo gilipollas, machista, mujeriego, payaso, mentiroso u otras virtudes similares, lo suyo es dar alguna oportunidad más, nunca somos del todo nosotros al principio, piensa en lo que te llevó a esa primera cita, esa chispa que despertó sigue ahí, quizás cubierta de miedos e inseguridades provocadas por el interés que tiene en esa persona o quizás no, vale, también es posible que simplemente sea un NO y hay que asumirlo sin más.
Cuando va bien: Ohhhh... Ves como después de haber conseguido conquistar el reloj y que horas pasasen como minutos, mientras camináis hacia vuestro vehículo en la despedida, os acompañan corazoncitos flotando alrededor y aflojáis el paso para que sean más los segundos que pases a su lado, precioso! Tanto tanto, como irreal, pero bueno. 

Ojalá siguieran por ese curso las cosas pero... Por mi experiencia he de decir que lo que muy fuerte entra igual de fuerte sale. Y carpe diem para el que lo quiera, conmigo esa frase no va nada. Soy más de despacito y con buena letra jeje.

Y van transcurriendo los días y ratos juntos, cada vez más sustanciales, la confianza crece, ves como su sentido de humor aflora, comienzan los acercamientos físicos, las risas disminuyen a medida que las miradas cómplices aumentan... Suena bien eh?

Que pena que hoy en día lo que prevalezca en la vida de solteros/as sean esos momentos y queden tan solo en eso, momentos. 

Rara vez la cosa cuaja y cuando es así es brutal, la descripción de ese estado la voy a dejar para más adelante, creo que ahora para mi la más apropiada es esta. 

Por cierto, pero rizado o liso? Jeje 

Gracias por leerme. Besos!

1 comentario:

  1. Guay! Muy completo jajaja..sigue así quiero saber como continúa la historia, seguro tiene final feliz ;)

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